viernes, 14 de octubre de 2011

Cross over.

-¿Te suicidaste?-Pregunta Cassandra, sentada en el suelo, una pierna flexionada, la otra reposando y los brazos cruzados en su habitual postura defensiva.

-¿Le vendiste a ese bicho tu voluntad?-Responde Sandra, sarcástica, alzando una ceja, en una postura casi idéntica a la de la cazadora que suelta una carcajada.

-No le conoces. Es peor y más listo que el demonio.

-No me hables de demonios.-Gime Sandra.-Además, me arrepentiré de haberme matado toda mi vida... O lo que sea esto.

A pesar del sarcasmo, ambas se entienden bien. Ambas se comprenden. Ambas son lo mismo, igual que cada persona de las que está en ese sitio.

-¿Es este el club de las muertas?-Pregunta Emily, con una sonrisa amigable. Se hecha el velo raído de novia hacia atrás, guiando a Sybelle que se deja llevar como sonámbula.

-Ni se te ocurra acercármela.-Gruñe Cassandra, entrecerrando los ojos con la vista fija en Sybelle mientras sus manos se cierran en torno a la estaca.

Emily se encoje de hombros y conduce a la vampiresa hacia de nuevo al piano, donde las dos empiezan a tocar. Sybelle vuelve a su eterna Apasionatta así que Emily, un poco aburrida de esa canción, empieza a hablar con Maya, la chica de sonrisa amable pese a sus llamativos ojos rojos y su cabello completamente blanco, que le hace saber por señas que no puede hablar.

Nada puede sorprenderlas. (Sorprenderlas, ya que, menos el mediano que juega como si fuese un crío con la otra hobbit y la sonriente Constanze, todas son mujeres. O niñas.) Están en un lugar extraño que cambia y se ajusta a lo que necesitan, hablando y descubriendo que todas comparten alma. Aunque sean tan distintas.

Muchas han muerto de un modo u otro, pero sólo Campanilla es un fantasma que revolotea emocionada de poder hablar con ellas.

-Yo quiero a Peter, pero es muy cruel.-Gimotea, y Harley asiente vehementemente, diciendo que la entiende. Pero es Deneb quien se acerca tímidamente para preguntar a la niña fantasma sobre su Peter.

-Yo también tengo un Peter Pan.-Confiesa ruborizándose.-Y... Bueno. Es quien da sentido a mi vida.

-¡Es que es el amor el que da sentido a nuestra vida! ¡Todas necesitamos a nuestro caballero....!-Suspira Harley, antes de ser cortada secamente por varias voces.

-No.-Sandra.

-No.-Vanessa.

-No.-Cassandra

Maya niega lentamente. Linny y Pip, los medianos se ríen a carcajadas y Ai mantiene su frío silencio.

-Entonces, ¿Qué es lo que tenemos en común?-Pregunta Constanze, mirando con recelo a las otras.

-Creo que todas nosotras hemos estado... Torturadas de algún modo.-Comenta Ai, recorriendolas a todas con la vista. Su cuerpo de niña contrasta con su manera de hablar, mucho más adulta.-Y ante ese hecho traumático reaccionamos de tres maneras: Una volviéndonos "guerreras"

 Señala al sitio sonde Cassandra y Sandra siguen compartiendo sus experiencias. Vanessa se ha unido a ellas y comparte una mirada con Sandra. Ellas comparten algo más que Cassandra no hace. Ambas esconden un sentimiento hermoso, puro, brillante. Ambas lo ocultan para que la oscuridad de sus vidas no lo ensucie. Ambas aman a alguien pero tienen miedo de que las vuelva vulnerables, no pueden permitírselo así que ellas mismas tratan de negárselo. Y ninguna consigue hacerlo del todo.

El gesto también abarca a dos adolescentes (una de ellas tiene ojos grises y con un extraño talismán en el cuello,con el que juguetea, la otra pupila felina y el pelo color caramelo rizado y suelto); a una chica con una sonrisa escalofriante tatuada en su rostro y a una pirata con el pelo en rastas de un rabioso color rojo que pasea de un lado a otro evidentemente incómoda.

-Luego están las que deciden trivializar todo, incluso su propia vida para que nada les afecte.

-Ohhhh ¡Que profundo!-Ríe Harley. Y su risa se contagia a Linny, Pip y Stancie. 

-Lo trivial es en realidad lo único que importa.-Contesta una vampira vestida con gastadas ropas de cuero y estigmas en las manos. 
Vanessa tiene que contener a Cassandra para que no empuñe de nuevo su estaca.-No te preocupes, matamoscas, yo ya he muerto en todas las formas que puedo morir. ¿Y qué mas da?

-¿Y que tal? Yo aun estoy atada a este mundo.-Responde la translúcida Campanilla. La vampira se encoge de hombros, sonriendo.

-Duele más vivir.

-Y por ultimo están las sumisas, las que se vuelven calmadas y... ¿Amables?

La pequeña Ai señaló a la pianista y la novia muerta. Aunque también incluía a Maya, Deneb y a la chica de expresión ida y pelo color chocolate que les había dicho que todas compartían alma. "Lo sé, porque soy vidente."Respondió antes de sumirse en sus visiones.

Vanessa es la que vuelve a dirigirse a la vidente. Cree que se llama Leah, aunque no recuerda que ella halla dicho su nombre. Pero de algún modo todas allí de conocen.

-Vale, compartimos alma. Muy profundo... ¿Y que se supone que hacemos aquí?

-Ella quería juntarnos.

-¿Quién es "Ella"?-Pregunta Deneb.

-Todas compartimos alma. SU alma. Somos trocitos de ella que ha ido moldeando, creando, dándonos nuestro propio mundo y nuestra 
propia vida. Somos ella.

-Me encantaría agradecerle el mundo que me ha dado a mí.-Bufa Sandra.-Pero ¿por qué estamos aquí? ¿Que pretende?

-Escucharnos. Analizarnos. Sentirnos. Porque nosotros la necesitamos y siempre la necesitaremos pero ella... Se esta dando cuenta ahora mismo, mientras escribe esto, cuantísmo nos necesita a nosotras.

1 comentario:

  1. Es decir, que si amo a la mayoria de personajes que salen aqui, amo a la mayoría de tu alma

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