viernes, 13 de enero de 2012

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No te tengo miedo.

No lo soportas, ¿verdad?

No suelen mostrar tu verdadera cara nunca, y cuando lo haces todos te temen. Y disfrutas de esa sensación. Te hace controlar la situación, te hace estar por encima, te hace controlar a quien quieras. Ser dueña y señora de la vida y la muerte. 

Eso es lo que conoces, eso es lo que te gusta. No esperas otra cosa. Pero cuando me muestras tu verdadera cara yo no me asusto. No te tengo miedo. No soy tan ingenua como para no respetarte, tus golpes duelen. Pero no me asustas como desearías, y eso te saca de tus casillas. Deseas matarme, deseas matarme con toda tu alma, y yo deseo que lo hagas. Pero te gusta matar lo que posees, y a mi eres incapaz de alcanzarme. Y eso te destroza por dentro, ¿verdad?

Porque yo no soy tuya. Y por eso me deseas, porque sabes que no te pertenezco y no sabes como conseguir que lo sea.

Me susurras amenazas al oído. Me encierras en pequeños y fríos espacios durante días. Me provocas tanto dolor de las formas más creativas que me haces perder el sentido. Me insultas con las palabras más hirientes, y nada de eso me afecta como querrías que lo hicieras.

¿No lo entiendes? No puedes poseer a alguien que pertenece a la muerte. Esta vez el miedo no va a lograr que sea tuya, como las otras. No puedes poseerme porque mi alma ya pertenece a un amo mayor que tú.  No puedes matarme porque ya estoy muerta.

2 comentarios:

  1. "No puedes poseer a alguien que pertenece a la muerte" <3
    Por cierto, ¿fan fic? ¿de qué?

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